Su forma de ser.

Cambias, bueno más bien, él te cambia. Cuando hablas con él, sientes que aunque solo sea por ese rato, todo esta bien.
Una de las cosas que más me gustan de él, es su personalidad; él es carismático, dispuesto a ayudarte y siempre con una sonrisa en la cara. Da igual lo mucho que se tuerzan las cosas, hay algo en su mirada que cuando estoy con él me hace pensar que todo esta bien. Yo admito, que como todo el mundo tiene momentos mejores o peores, que hace muchas tonterías, pero luego no se arrepiente de ninguna a no ser que halla herido a alguien, y aunque parezca tonto por las cosas que pueda decir, son sus tonterías las que me alegran el día. Y es que puede que no sea perfecto, ni mucho menos, pero, por lo menos yo, aunque sea el peor día de mi vida, he podido sonreír cuando él a estado conmigo.